Aborde las micotoxinas en las vacas lecheras con un enfoque de prevención y protección

La amenaza de las micotoxinas puede que le haga usar, o plantearse usar, un captador de micotoxinas. Parece una solución sencilla, ¿verdad?

Pero piénselo un momento: La sabiduría popular nos dice que ningún producto secuestra el 100 % de las micotoxinas en el ganado lechero. Además, los rebaños suelen afrontar no solo uno, sino múltiples contaminantes de micotoxinas a la vez, algunos más fácilmente aglutinables que otros.

Eso significa que centrarse únicamente en el secuestro deja a sus vacas susceptibles.

Inevitablemente, algunas micotoxinas superarán la fase de secuestro, por lo que las vacas necesitarán una segunda capa de protección. Necesitan protección intestinal, concretamente una integridad intestinal más fuerte, para evitar que las micotoxinas no aglutinadas causen daños que podrían resultar en que los patógenos entraran en órganos vitales.

La resiliencia comienza en el intestino.
La mayor parte de la función inmunitaria de cualquier mamífero reside en el intestino. Cuanto más fuerte sea el intestino de su vaca, más resiliencia tendrá cuando se enfrente a algún tipo de amenazas víricas o bacterianas. Cuanto más resiliente sea, en teoría, más rápida será su recuperación.

Entonces, ¿cómo podemos fortalecer la integridad intestinal de las vacas?

Dando un paso más allá de la prevención de micotoxinas, gracias a BG-MAX™.

BG-MAX contiene Carbohidratos Funcionales Refinados™ (RFC™) para prevenir, o secuestrar las micotoxinas en las vacas lecheras, y protegerlas al fortalecer la integridad intestinal.

Un enfoque inspirado en la ciencia (#ScienceHearted).
Conseguir que estos RFC adopten una forma utilizable es una tarea complicada pero meritoria:

Las paredes celulares de la levadura contienen compuestos potentes que ofrecen un conjunto de beneficios útiles para la salud, pero estos compuestos no se eliminan fácilmente.
ARM & HAMMER usa un proceso especializado llamado hidrólisis enzimática para eliminar los RFC de la pared celular de la levadura.
Este proceso especializado usa enzimas precisas para liberar la D. manosa, los manano oligosacáridos (MOS) y los beta glucanos de la pared celular bajo una forma altamente biodisponible.
Cuanto más biodisponibles estén estos compuestos, mejor funcionarán para mejorar la salud intestinal, secuestrar los agentes patógenos y las micotoxinas y modular el sistema inmunológico para que esté preparado.
BG-MAX también contiene bentonita altamente refinada, un compuesto de arcilla, para una cobertura de amplio espectro. La mayor parte de la bentonita que se usa actualmente para el secuestro de micotoxinas es apta para piensos. Es barata, pero debe usarse en un alto volumen y con un alto índice de inclusión. La bentonita altamente refinada de BG-MAX tiene más área de superficie, lo que significa que puede suministrarse con un índice de inclusión más bajo.

La bentonita es un aglutinante inespecífico, lo que significa que secuestra otras sustancias aparte de las micotoxinas, incluso los nutrientes que necesitan las vacas lecheras. La bentonita altamente refinada de BG-MAX actúa de forma más magnética que las bentonitas para piensos, atrayendo de forma más específica las cepas clave de micotoxinas.

La combinación de los RFC de alta disponibilidad de BG-MAX y la bentonita altamente refinada no solo ayudan a prevenir las micotoxinas en el ganado lechero, sino que también protegen el intestino de los daños adicionales que podrían causar las micotoxinas entrantes.

La salud intestinal es más importante que nunca.
Estamos viendo cómo surgen y se propagan rápidamente nuevos patógenos. Si la resiliencia se forja en el intestino, es lógico que la salud intestinal sea más importante que nunca.

Prevenga y protéjase de forma proactiva contra las micotoxinas y refuerce la integridad intestinal con BG-MAX. Colabore con su representante local de ARM & HAMMER para lograr un rebaño más resiliente.